Marcha y represión en Chile
Tras la ruptura de diálogo con el Gobierno y una truncada negociación de más de cinco horas con las autoridades de la Intendencia Metropolitana de Santiago de Chile, secundarios y universitarios realizaron la movilización prevista sin autorización gubernamental. Los carabineros volvieron a las calles con sus carros hidrantes para reprimir y controlar un supuesto desorden. La crisis educativa comenzó a inicios de mayo en reclamo por los altos costos de la educación, que cuenta con uno de los sistemas de mayor privatización del mundo.
El jefe de Seguridad Pública de la Intendencia, Gonzalo Díaz del Río, afirmó que el carácter irregular de la movilización es responsabilidad de los estudiantes. "Nosotros hemos demostrado la misma voluntad de diálogo, para compatibilizar el derecho a manifestarse de los estudiantes, con el derecho a transitar libremente y a vivir en paz, que también tienen el 1,2 millones de personas que cada día realizan sus actividades en el centro de Santiago", afirmó según difundió La Tercera.
Los estudiantes chilenos habían resuelto retirarse de la negociación abierta con el Gobierno de Sebastián Piñera. "Nosotros creemos que bajo estas condiciones es imposible darle continuidad a esta mesa de trabajo", explicó Camila Vallejo, una de las dirigentes más visibles del movimiento estudiantil, al final de una reunión de casi cuatro horas con el ministro de Educación, Felipe Bulnes. Es que en simultáneo al anuncio de una ronda de negociaciones, el Gobierno anunció que impulsará una reforma del Código Penal que condenará con cárcel la ocupación de establecimientos públicos y privados (colegios, universidades, etc.).
A mitad del encuentro con el ministro de Educación, dirigentes de dos agrupaciones de estudiantes secundarios se retiraron de la reunión, y más tarde se sumaron también los representantes del Colegio de Profesores.
Los estudiantes aspiran a la creación de un sistema público que garantice educación gratuita y de calidad para todos y plantearon en la mesa un aumento en el pago por las regalías mineras, un incremento general de impuestos y la disminución de los gastos de las Fuerzas Armadas para recaudar mayores recursos a la educación. El presupuesto actual de educación supera los 11 mil millones de dólares, el más grueso entre todas las partidas. Para el próximo año, está previsto un incremento de 7,6 por ciento, considerado "insuficiente" por los estudiantes.
Sólo el 40 por ciento de los escolares chilenos recibe educación en colegios públicos gratuitos, mientras que a nivel universitario no hay posibilidades de estudiar gratis. Para acceder a las universidades, los estudiantes deben solicitar créditos internos o en bancos privados. A nivel secundario, más de la mitad de la matrícula está en manos de colegios que reciben subvención estatal y el aporte de los padres.
Clarin
Chile: manifestantes se enfrentan con policías en una nueva marcha estudiantil
06/10/11 - 11:20
Carabineros lanzaron chorros de agua y gases lacrimógenos a los grupos de estudiantes que se encontraban en la céntrica Plaza Italia de Santiago. Ocurre luego de que ayer se rompiera el diálogo con el gobierno de Piñera.
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CHILE. Manifestantes se enfrentan a un vehículo antidisturbios durante la marcha de estudiantes. (EFE)
CHILE. Manifestantes se enfrentan a un vehículo antidisturbios durante la marcha de estudiantes. (EFE)
CHILE. Manifestantes se enfrentan a un vehículo antidisturbios durante la marcha de estudiantes. (EFE)
CHILE. Manifestantes se enfrentan a un vehículo antidisturbios durante la marcha de estudiantes. (EFE)
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Chile, conflicto estudiantil
Una nueva jornada de protesta de estudiantes chilenos que reclaman un sistema educativo gratuito y de calidad terminó esta mañana marcada por los incidentes que ocurrían en las inmediaciones de la Plaza Italia, en Santiago.
Los carabineros (la Policía chilena) lanzaron chorros de agua y gases lacrimógenos a los manifestantes.
Los estudiantes fueron convocados a reunirse allí un día después de que se quebrara una mesa de diálogo instaurada con el gobierno para destrabar un conflicto que se extiende ya por cinco meses.
El gobierno de Santiago había autorizado la manifestación, la número 37 que tiene lugar en Santiago, pero con un recorrido distinto al que pretenden hacer los estudiantes, partiendo desde el frontis de la Universidad de Santiago, en el oeste de la capital chilena.
Desde temprano, sin embargo, miles de estudiantes comenzaron a congregarse en las cercanías de la Plaza Italia, tradicional lugar de celebraciones de Santiago, para emprender una marcha por la céntrica Alameda, hasta el palacio presidencial de La Moneda.
Con una decena de carros lanza-agua y gases lacrimógenos y un fuerte contingente de fuerzas especiales, la Policía intentó disolver la manifestación, provocando enfrentamientos con algunos de los manifestantes.
Los dirigentes de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech) se reunieron ayer con el ministro de Educación, Felipe Bulnes, a quien le presentaron una propuesta que busca establecer un sistema educativo gratuito y de calidad.
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